Los dos pilares de la Política Agraria Común (PAC) -pagos directos y desarrollo rural- desempeñan un papel importante en el apoyo a la renta agraria. Así, el apoyo de la PAC supone de media el 36% de la renta agraria, mientras que los pagos directos suponen el 26%, según un estudio publicado por la Comisión Europea (CE).