La colección de olivos del Consejo para la Investigación Agrícola y el Análisis de la Economía Agraria (CREA), cuyo Centro de Investigación de Olivicultura, Fruticultura y Citricultura tiene su sede en Rende (Calabria, Italia), ha sido reconocida por el Consejo Oleícola Internacional (COI) y se integrará en la red mundial de Bancos de Germoplasma.
“Me complace comunicar que Italia ha alcanzado un gran y merecido éxito mediante el reconocimiento, por parte del COI, de la colección del CREA en la red internacional de Bancos de Germoplasma del olivo de este organismo. Agradezco al CREA y al Ministerio de Agricultura, de la Soberanía Alimentaria y Forestal (MASAF) que han apoyado durante años el trabajo minucioso, paciente y altamente especializado de este centro de investigación", ha resaltado Enzo Perri, Centro de Investigación de Olivicultura, Fruticultura y Citricultura.
Este centro ha informado en su página web que la colección del CREA es la única en Italia que cuenta con este reconocimiento y es la mayor colección nacional de germoplasma del olivo. Se trata de un patrimonio de agrobiodiversidad, repartido en dos zonas (Mirto Crosia y Rende), ambas en Calabria, y compuesto por 600 variedades, de las cuales 200 están autentificadas y son comunes a la colección española.
Según ha destacado, “la colección CREA se sitúa a la vanguardia en el estudio del germoplasma y en la búsqueda de genotipos tolerantes o resistentes como respuesta a enemigos externos, tales como la Xylella fastidiosa y el Verticillium dhaliae, así como el aumento de las temperaturas medias invernales, la sequía y los fenómenos meteorológicos inesperados (granizo, niebla y heladas fuera de temporada) que están afectando a la producción mundial de aceituna”.
A su juicio, la red de colecciones internacionales permitirá, en los próximos años, comprender mejor la agrobiodiversidad del olivo, las necesidades de la planta y seleccionar aquellas variedades capaces de tolerar la reducción del frío invernal -que ya está afectando negativamente a la floración- y, por tanto, garantizar la producción de aceitunas, a pesar del actual aumento de las temperaturas.