Según la organización, esto no sólo contribuye a la sostenibilidad del sector agroalimentario, sino que también abre nuevas líneas de negocio y mercados nacionales e internacionales, fortaleciendo el posicionamiento de las empresas andaluzas en el ámbito de la alimentación funcional.
En concreto, este proyecto se centra en la investigación y desarrollo de prototipos de ingredientes proteicos innovadores a partir de fuentes alternativas a la proteína animal. Gracias a la experiencia acumulada en los últimos años, CIDAF ha conseguido consolidar su capacidad tecnológica en el ámbito de las proteínas alternativas, dotándose de equipos de laboratorio y planta piloto que permiten llevar a cabo todo el proceso productivo, adaptándolo a las características y finalidad de cada ingrediente.
Cooperativas Agro-alimentarias de Granada ha precisado que, actualmente, el proyecto se encuentra en una fase clave, en la que se están optimizando los procesos de extracción de proteínas a partir de las materias primas seleccionadas. Este avance, a su juicio, supone un paso fundamental para mejorar la eficiencia y calidad de los ingredientes desarrollados, con el objetivo de facilitar su futura aplicación en productos alimentarios innovadores.
Más allá del impacto científico y tecnológico, la organización ha resaltado que PROSOST representa una oportunidad estratégica para la industria agroalimentaria andaluza. A través de este proyecto, CIDAF está reforzando su red de colaboración con empresas del sector, identificando potenciales beneficiarios de estas nuevas tecnologías y facilitando la transferencia de conocimiento y desarrollo de nuevos productos patentables.