la Feria Internacional de Alimentación y Bebidas de Calidad afronta su XXVI edición con sus miras puestas en la internacionalización del evento y una fuerte apuesta por el sector de los vinos de calidad. Para ello acaba de comenzar el proceso de comercialización cuya meta es conseguir que la muestra sea el escaparate mundial de los mejores productos delicatessen (cifras auditadas de la XXV edición: una plataforma de 24.127 m2 de exposición, 1.270 expositores, 78.444 visitantes profesionales, 38.000 productos expuestos y 1.000 novedades a escena).