El índice de precios de los aceites vegetales de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) aumentó un 1,8%, hasta los 133,5 puntos, marcando su nivel más alto desde octubre de 2018. La subida en febrero se debió sobre todo a los precios más altos para los aceites de palma, soja y girasol.