La
Red Andaluza de Inspección y Alerta Fitosanitaria (RAIF) ha precisado que las condiciones meteorológicas de otoño e invierno, caracterizadas por lluvias abundantes, no sólo han favorecido la maduración de los frutos, sino que también han sido propicias para su desarrollo. Por ello, el repilo (
Fusicladium oleagineum) resulta especialmente relevante durante los períodos húmedos del otoño-invierno y en primaveras lluviosas y frescas.