El taller se organizó en el marco del Proyecto Regional de Cooperación Técnica de la FAO "Medidas preventivas para reducir el riesgo de introducción y propagación de la Xylella fastidiosa", cuyo objetivo es prevenir la introducción de la enfermedad en esta región, mediante la capacitación del personal técnico y los agricultores en la detección temprana, el diagnóstico, la vigilancia y las medidas fitosanitarias. Durante su intervención, Hussein Gadain, representante de la FAO en Egipto, destacó que "el sector oleícola es muy importante para los pequeños agricultores, por lo que cualquier pérdida en sus cosechas tendrá un impacto negativo en sus medios de subsistencia". Gadain añadió que "recientemente la FAO firmó un proyecto financiado por la UE que se centra en enseñar a los agricultores buenas prácticas agrícolas, incluyendo técnicas de protección de las plantas como la de la Xylella fastidiosa, lo que aumentará su capacidad para reducir las pérdidas que están relacionadas con este tipo de enfermedades". Por su parte, Shoki Al-Dobai, responsable regional de Protección de Cultivos de la FAO para el Norte de África y el Cercano Oriente, subrayó que el peligro de esta bacteria reside en el hecho de que podría destruir el 95% de los olivos, ya que se extiende a través de varios huéspedes distintos de las aceitunas como los cítricos, las uvas, las almendras y las plantas ornamentales, todas ellas de gran importancia para estas regiones. Al-Dobai señaló que "desde la propagación de la enfermedad por primera vez en la región de Puglia en Italia en 2013, la FAO está trabajando para advertir a los países acerca de esta enfermedad y cómo evitar su propagación”. Para ello, la FAO desarrolló y puso en marcha este proyecto de cooperación técnica en esta región a través de una serie de talleres en Argelia, Líbano, Libia, Marruecos, Túnez, Cisjordania y la Franja de Gaza y Egipto. Este proyecto pretende además ayudar a los gobiernos a preparar planes de emergencia para hacer frente a esta enfermedad y superarla mediante el desarrollo de planes de monitoreo preventivo. También creará capacidades para la detección temprana de la bacteria, los mecanismos de diagnóstico y control, así como para sensibilizar a las partes interesadas sobre su peligro. La FAO recordó que recientemente el ministro de Agricultura y Recuperación de Tierras de Egipto, Abdelmoneim El-Banna, anunció que el país plantará 100 millones de olivos en diferentes regiones, lo que beneficiará a los agricultores y comercializadores y aumentará las exportaciones, así como las oportunidades de empleo para los jóvenes.