Uno de los actores fundamentales de este proyecto es la industria alimentaria. Está representada en el equipo Food Start Tech Corporate a través de un grupo de 10 empresas del sector alimentario, altamente innovadoras y abiertas a nuevas fórmulas de colaboración y búsqueda de ideas, según ha informado el CNTA. La constitución del equipo y primera reunión de trabajo tuvo lugar el pasado 19 de septiembre, y en ella participaron empresas como Borges y Aceitunas Guadalquivir. En cuanto a los retos tecnológicos que tratarán estas empresas figuran: alimentos con menos aditivos y nuevas tecnologías que permitan dar información transparente y contar la historia que hay detrás de cada producto; y nuevos productos e ingredientes funcionales; materiales biodegradables, aptos para el compostaje, con funcionalidades similares al plástico. También destacan sensores y sistemas rápidos de monitorización de parámetros de proceso ligados a la calidad y a la seguridad de materias primas y alimentos; nuevos ingredientes y alimentos ricos en proteínas; y mejora de perfil nutricional. Tras este primer encuentro está previsto la realización de un estudio de start ups que trabajan en áreas relacionadas con estos retos para explorar las posibilidades de colaboración. Esta base de datos estará disponible a finales de año. Asimismo, los días 16 y 17 de noviembre se reunirán empresas, startups e investigadores para generar ideas, nuevas aproximaciones e identificar oportunidades futuras que puedan dar pie al desarrollo de proyectos de innovación, investigación y de colaboración entre los participantes, con el objetivo de resolver los retos planteados en la primera reunión. Tras esta primera fase de Food Start Tech, las empresas participantes tendrán la posibilidad de ejecutar las ideas que se puedan generar o los posibles proyectos en una fase posterior a Food Start Tech y cada empresa participante decidirá si desea continuar.