Según las cifras de este organismo, a mes de noviembre, publicadas en su página web, de la producción total de aceite de oliva, 2.219.000 t. corresponderán a la UE, un 1,5% más respecto a la campaña 2017/18. Para España prevé 1.598.900 toneladas, un 26,8% más respecto a la campaña pasada.
En el caso de Italia estima 265.000 toneladas (-38,2%), seguida de Grecia (225.000 t., -34,9%), Portugal (115.000 t., -14,6%), Chipre (6.00 t., similar a la campaña anterior); Francia (5.900 t., similar a la temporada precedente); Croacia (3.000 t., -23%); y Eslovenia (400 t., cifra similar a 2017/18).
Por detrás de los países comunitarios, se sitúan Marruecos (200.000 t., +42,8%), Turquía (183.000 t., -30,4%), Túnez (120.000 t., -57,1%) y Argelia (76.500 t., -7,2%).
Exportaciones e importaciones
Según los datos que baraja el COI, el consumo mundial será de 2.950.500 toneladas, lo que supone un descenso del 1,9% respecto a la campaña anterior. La UE continuará a la cabeza en consumo, con un total de 1.529.000 toneladas (-3,4%), seguida de lejos por Estados Unidos, con 315.500 t. (+0,15%); y Marruecos, con 140.000 t. (+16,6%).
Respecto a las exportaciones globales, este organismo estima un total de 844.500 toneladas de aceite de oliva, lo que supondría un descenso del 10,6% respecto a la temporada anterior, que registró 945.500 t.. La UE también lidera las ventas al exterior de este producto, con 573.000 toneladas (+1,6%), seguida por Túnez, con 130.000 t. (-35%).
En cuanto a las importaciones globales, se situarán en 874.500 toneladas, lo que supone una caída del 6,5% respecto a la campaña anterior. Estados Unidos continuará como principal comprador de aceite de oliva, con 310.000 t. (-0,16%).