Según ha recordado el Ministerio francés, esta bacteria ataca a más de 200 especies de plantas (olivos, vides, frutales, fresnos, robles, adelfas, etc.) y está presente en el sureste de Francia, así como en los países del sur de Europa (España, Italia y Portugal). El principal desafío de esta campaña de comunicación es prevenir la propagación de la bacteria transportada por los flujos comerciales de plantas sensibles y por los viajeros que traen de regreso de su estancia plantas de áreas contaminadas. El objetivo es que sean conscientes de la importancia de no llevar plantas en su equipaje y comprarlas en lugares específicos. La campaña persigue informar al público sobre las regulaciones vigentes, que se aplican en áreas demarcadas, y se dirige a viajeros, conductores y jardineros aficionados que entran o salen de estas áreas. Esta iniciativa también está dirigida a profesionales del comercio de plantas (viveros, centros de jardinería, autoridades locales, etc.) que deben estar informados sobre el riesgo de la Xylella fastidiosa y sus síntomas, ya que son actores importantes en la prevención de la bacteria. En este sentido, según el Ministerio francés, deben ser conscientes de la importancia de comprar solo plantas debidamente controladas, cuando corresponda con un pasaporte europeo para plantas, y de saber identificar los síntomas y notificar cualquier contaminación a los organismos competentes.