El proyecto, que acaba de iniciarse y tiene una duración de 42 meses, cuenta con un presupuesto total de 7,5 millones de euros y está financiado por Horizon 2020, el programa de investigación e innovación de la Unión Europea. El consorcio está formado en total por 26 actores europeos (de diez países distintos) claves en la cadena de valor agroalimentaria, y está liderado por el Centro Nacional de Tecnología y Seguridad Alimentaria (CNTA). La coordinación de un proyecto de este calibre supone una excelente oportunidad y un reto apasionante para CNTA: “Nos permite trabajar de la mano de entidades de punteras en tecnologías alimentarias, digitalización y organización de cadenas alimentarias. Hemos unido fuerzas con empresas alimentarias y diversas asociaciones que representan a los actores claves a lo largo de toda la cadena de suministro con el fin de avanzar en el desarrollo de un sistema alimentario fuerte y sostenible, de especial importancia en estos momentos de pandemia”, ha asegurado Inés Echeverría, directora de I+D+i de CNTA. El principal objetivo de CO-FRESH es diseñar y poner a prueba enfoques sistémicos innovadores para las cadenas de valor agroalimentarias y aplicarlos a nivel europeo. Para ello, y de modo colaborativo, se emplearán herramientas que permitan promover estas soluciones innovadoras en base a nuevas tecnologías de conservación de alimentos más sostenibles, nuevas soluciones en base a TICs, nuevos modelos organizacionales y de gestión. Estos enfoques mejorarán el desempeño económico, social y ambiental, así como la eficiencia de estas cadenas de valor, mediante la integración inteligente de innovaciones tecnológicas, sociales, organizacionales, gerenciales e institucionales.