“Si bien en esta campaña agrícola hemos visto que el precio en origen del aceite ha experimentado una subida que pudiera entenderse como un mayor beneficio para el productor, este incremento no se ha traducido en una mayor liquidez o ganancia para el productor", ha explicado el presidente de Asolite, Francisco Guerrero. Guerrero ha precisado que los bajos rendimientos de la aceituna recolectada la pasada campaña tuvo como resultado una menor producción de litros de aceite en relación a los kilos de aceituna recolectados, lo que significa que "cadaagricultor necesitó emplear más kilos de aceituna para producir cada kilo de aceite, por lo que el coste del aceite fue mayor que otras campañas". Por otra parte, la asociación ha señalado que el resto de costes que soporta el productor son cada vez mayores, por lo que "la presunta ganancia del agricultor se esfuma". En este sentido, ha añadido que "la tarifa de la luz ha subido hasta máximos históricos, al igual que no cesa el ascenso en el precio del gasóleo de uso agrícola que ha experimentado un importante incremento en el último año, mientras que por parte del Gobierno no se ha establecido ningún tipo de medida tendente a paliar los graves efectos que estas subidas causan a los agricultores, destacando por su vulnerabilidad los del olivar tradicional que ven imposible hacer frente a los costes energéticos del riego de sus explotaciones". Según ha indicado, "el elevado coste de la luz está generando un doble perjuicio al productor, dado que la inmensa mayoría de Comunidades de Regantes, viendo la imposibilidad de hacer frente al pago de la luz de los riegos, han tenido que reducir los periodos de riego de las fincas de olivar de sus respectivas comunidades para no exceder de la tarifa nocturna, por lo que estas explotaciones están recibiendo mucha menos cantidad de agua que otros años incidiendo directamente en la cantidad de cosecha a recolectar en la próxima campaña, lo que se une la sequía y olas de calor extremo que estamos padeciendo este verano".