Un nuevo proyecto estudia la Dieta Mediterránea como base de un estilo de vida activo y saludable

Según han explicado sus impulsores, en las últimas décadas, los hábitos alimentarios han cambiado drásticamente hacia el consumo de alimentos y bebidas ultraprocesados . La contribución global de este tipo de alimentos a la ingesta de nutrientes supera con creces el 50% en muchos países euromediterráneos y se ha demostrado que está asociada con efectos nocivos, no sólo para nuestra salud, sino también para nuestro ecosistema.

"Para romper este círculo vicioso, necesitamos cambiar urgentemente nuestros hábitos alimentarios y, en combinación con actividades físicas y sociales, encontrar un estilo de vida activo, saludable y sostenible para nosotros como seres humanos y para nuestro medio ambiente", ha afirmado Achraf Ammar, de la Universidad Johannes Gutenberg de Maguncia (Alemania).

Para ello, se ha puesto en marcha el proyecto PRIMA EU MEDIET4ALL, cuyo objetivo es promover un estilo de vida mediterráneo saludable. Bajo la dirección de Achraf Ammar, con el apoyo de Wolfgang Schöllhorn, Juliane Heydenreich y Christiana Schallhorn, en ese proyecto participan diez socios de ocho países, especialmente de la región mediterránea. El consorcio cuenta con un presupuesto de 2,4 millones de euros.

"Este alarmante crecimiento global del consumo de alimentos ultraprocesados y los consiguientes efectos adversos sobre la población y el ecosistema resaltan la necesidad urgente de tomar medidas", ha destacado Achraf Ammar, quien ha señalado que "el proyecto MEDIET4ALL reunirá perspectivas saludables y ecológicas, conocimientos multidisciplinarios de expertos y tecnologías inteligentes para apoyar la transición de una cultura de alimentos ultraprocesados a alimentos no procesados o mínimamente procesados".

Los socios de cooperación basan sus estudios en la Dieta Mediterránea, el patrón alimentario que promueve la salud y la longevidad y al mismo tiempo salva el ecosistema. Además, en la cocina se da prioridad a las frutas, verduras, productos integrales y al aceite de oliva, complementados con pescado y muy pocos productos lácteos y carne.

Con la ayuda de un estudio basado en encuestas electrónicas multilingües, los socios de la investigación intentan inicialmente comprender el comportamiento de los consumidores euromediterráneos e identificar su adherencia a la Dieta Mediterránea y sus factores determinantes. Posteriormente, diseñarán y probarán varios programas personalizados para apoyar la adherencia a un estilo de vida mediterráneo saludable que incluya no solo recomendaciones dietéticas, sino también actividades físicas y sociales.

Entre los socios académicos del proyecto se encuentran la Universidad de Borgoña (Francia); la Universidad de Valencia (España); la Universidad de Palermo (Italia); la Universidad de Sfax (Túnez); la Escuela Nacional de Agricultura de Meknès y la Facultad de Medicina y de Farmacia de Rabat (Marruecos); y la Universidad de Boumerdes (Argelia). Los socios no académicos incluyen el grupo de innovación agroalimentaria Vitagora, en Francia; y el instituto de formación y empresa social Microtarians, en Luxemburgo.

"Nuestro desafío es crear un movimiento transnacional para promover la cultura de la Dieta Mediterránea y así apoyar la transición hacia alimentos saludables mínimamente procesados", ha remarcado Ammar.

Con este fin, el proyecto MEDIET4ALL combinará actividades científicas y promocionales para promover simultáneamente la conveniencia, el atractivo y la competitividad de los productos que forman parte de este patrón alimentario, al tiempo que creará conciencia sobre los efectos adversos de los alimentos ultraprocesados en comparación con los beneficios generales de la Dieta Mediterránea.

Para ello, se programarán diversas actividades tales como clases de cocina, kits de herramientas digitales y juegos colaborativos, organización de campañas de sensibilización y motivación, y el desarrollo y ensayo de recetas modernas altamente nutritivas con sus bioenvases ecológicos. Además, se pondrá en marcha una plataforma para el contacto consumidor-productor, y se desarrollará la aplicación MEDIET4ALL que actuará como un entrenador de estilo de vida inteligente.

En general, los socios del proyecto también van más allá de los aspectos sanitarios ya que la Dieta Mediterránea también ayuda a ahorrar agua y energía, reducir los gases de efecto invernadero y preservar los suelos.