El informe del MAPA señala que la reducción del volumen de las compras de los hogares españoles se traslada tanto al aceite de oliva (-22,4%, hasta 10,7 millones de litros), como al aceite de oliva virgen (-24,3%, hasta 2,1 millones de litros), pero destaca principalmente el aceite de oliva virgen extra, ya que experimenta una mayor contracción (-52,5%, hasta 5,3 millones de litros). Este aceite, según el Ministerio, mantiene el precio medio litro más alto de la categoría y es el que además experimenta la mayor subida (8,66 euros/litro; +63,8% respecto al mismo periodo del año anterior).
El MAPA subraya que el aceite de girasol, el de orujo de oliva y el de semilla crecen de manera muy significativa (+21%, +145,5% y +97,9%, respectivamente).
Por otro lado, el Ministerio detalla que el consumo de aceite de oliva virgen extra en el año móvil -esto es, de diciembre de 2022 hasta noviembre de 2023- fue de 108,6 millones de litros (-21,9%) por valor de 711,5 millones de euros (+10,7%). Por su parte, el consumo per cápita de este producto en dicho período fue de 2,31 litros.
En cuanto al aceite de oliva virgen, los hogares españoles consumieron en dicho período un total de 30,6 millones de litros (-3,3%), que supuso un gasto de 181,7 millones de euros (+38%). Su consumo per cápita fue de 0,65 litros.
Respecto al consumo de aceite de oliva, los datos del panel del MAPA detallan que los hogares españoles adquirieron en el año móvil un total de 151 millones de litros (-11,7%) por valor de 807,3 millones de euros (+24,5%). Su consumo per cápita fue de 3,21 litros.