Dichas actuaciones tienen por objeto fortalecer la resiliencia del tejido empresarial andaluz y facilitar el acceso a nuevos mercados, todo ello en aras de garantizar la sostenibilidad de la actividad exportadora andaluza.
Pese a la moratoria de 90 días aprobada por el Gobierno de EEUU para los aranceles del 20% impuestos a la Unión Europea, las medidas arancelarias han provocado incertidumbre y tensiones en el comercio internacional, según la Junta. En cualquier caso, la Administración norteamericana mantiene un arancel genérico del 10% para todos los países y un 25% para los sectores del acero, el aluminio y el automóvil.
Tras el anuncio de los aranceles, los mercados financieros globales han registrado una elevada volatilidad. En este sentido, el Gobierno andaluz ha subrayado que las políticas proteccionistas adoptadas tienen impacto directo sobre las exportaciones europeas, españolas y andaluzas, y también sobre las importaciones, además de un impacto indirecto, que se aprecia en la desaceleración económica de los principales mercados exteriores, lo que genera un riesgo cierto para sectores estratégicos como el del olivar (aceite, aceituna de mesa...).
El plan desarrollado por la Junta de Andalucía se articula en torno a cuatro ejes. El primero de ellos, relativo al apoyo económico y financiero de las empresas andaluzas, contempla 615,4 millones de euros en ayudas e instrumentos financieros. Entre estas ayudas destacan, por ejemplo, los incentivos de Andalucía TRADE al desarrollo industrial y la innovación (200 millones), los incentivos a la internacionalización y otras medidas de apoyo al sector exportador (63 millones), incentivos a proyectos tractores de la Consejería de Energía, Industria y Minas (150 millones), las ayudas para el pago de comisiones y otros gastos financieros, o los diversos instrumentos financieros enfocados al sector agrario, empresas en expansión o startups. A esta cantidad hay que sumar otros 2.260 millones de euros de financiación bancaria, impulsada por la firma de un protocolo entre la Junta de Andalucía y las principales entidades financieras que operan en Andalucía para establecer líneas de financiación en condiciones competitivas.
En segundo lugar, el plan incluye actuaciones de apoyo a la búsqueda de mercados alternativos y refuerzo de acciones comerciales, tanto por áreas geográficas como por sectores. Así, en lo que queda de año, se van a celebrar 87 acciones directas, que serán 115 en todo el ejercicio. Además, se impulsarán campañas específicas de promoción de los sectores afectados, como la aceituna de mesa en India; se reforzará el servicio de Inteligencia Comercial, con el fin de identificar nuevos importadores en mercados estratégicos como Mercosur, o el servicio de marketplaces internacionales. También se reforzará la participación institucional en todas las acciones internacionales de Andalucía TRADE.
En tercer lugar, las medidas se encaminan a una mayor colaboración y coordinación con ICEX España Exportación e Inversiones para fortalecer el posicionamiento internacional de las empresas andaluzas. Por último, el plan se centra en la monitorización de sectores y empresas más afectadas por los aranceles. Así, el Gobierno andaluz busca, en colaboración con la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), las Cámaras de Comercio y las asociaciones sectoriales, garantizar la efectividad y adecuación a las necesidades reales del tejido empresarial de las medidas de apoyo definidas.